Groove Armada, o sea Tom Findlay y Andy Cato, viven y trabajan como Djs en Londres. Sin embargo, cuando es hora de grabar su música, pueden llegar a irse al punto mas lejano de la civilización, creando sonidos de mucha pureza, naturaleza y felicidad, como una ventizca a través de la garganta. El debut de Groove Armada, llamado «Vertigo», es un documento con sonidos de sus excursiones veraniegas a Ambleside en Cumbre. “Es el mejor momento en el año para nosotros” dice amigablemente Tom. “Estás lejos de todos y realmente puedes enfocarte en la música. El único modo de que puedas están en contacto con el mundo es cuando vas al campo”. Lleno de robustos grooves, «Vertigo» es un álbum simultáneamente rico en atmósfera y profundamente contemplativo. “Lo que sea, cuando sea” dice M.A.D un miembro del club de fútbol de Tom. Usando un acercamiento desde lo orgánico, ha servido de ayuda para construir la reputación mundial, como dúo consumado capaces de ser Djs, producir y remixar con lo mejor de ellos. “Toda mi juventud estuvo llena de música en la escuela”, recuerda Andy Cato, quien toca una gran variedad de instrumentos, incluyendo trombón, teclados, y bajo. “Hice con la música todo lo que pude, sin ir a una escuela de música. Iba a ir a una escuela de música cuando cumpliera 17, pero por suerte mis padres hablaron conmigo para que me saliera y volví al mundo real”. Ambos se conocieron a través de la novia de Andy, quien los presentó. Para saltear “La mafia de los productores”, ambos abrieron un club propio que se llamó “Groove Armada”, sacando el nombre de un neologismo kitch de los ’70s de un disco club night en Newcastle. Inicialmente era un lugar de dos habitaciones, donde Andy tocaba house en una y en la otra Tom pasaba Funk. Al tiempo, mudaron la fiesta a otro lugar de un solo cuarto, de modo que iban cambiando. “Simplemente sucede que entre nosotros hay química” bromea Tom, quien toca la trompeta, la guitarra y varios tipos de teclados aquí y allí. “Creo que hay ciertas líneas de delineación entre lo que hacemos. Andy hace mas ingeniería y yo tiendo a hacer mas tazas de té, de lo que él podría. Creo que nos respetamos bastante el uno al otro, es dar y recibir y al final siempre terminamos con algo con lo que estamos contentos”. Groove Armada tendrá siempre raíces fuertes en las pistas de baile. “Nosotros crecimos escuchando discos que estaban compuestos por gente, aun siendo discos de dance o funk. En el escenario nosotros usamos tecnología para mantener los elementos rítmicos gordos y estáticos, pero reinterpretamos la canción para incorporarla a los shows en vivo”. Llenos de movimiento perpetuo, caos y algo bastante feliz y funky, Groove Armada, se presenta como una de las bandas mas importantes de los ’90s.
Para conocer algo de los comienzos de Groove Armada habría que trasladarse hasta mediados de los 90. Allí, gracias a su novia, Andy Cato conoce en una fiesta privada al periodista deportivo Tom Findlay. De los dos, quien poseía más conocimientos musicales era Cato, que en su niñez había escuchado mucha música, y se las ingeniaba para tocar varios instrumentos como el trombón, guitarra, y algo de teclados. En cuanto a Findlay, solía ejecutar muy precariamente el bajo y la trompeta. Pero su mayor caudal de aprendizaje lo logró como oyente de vinilos. Se pasaba horas en el sillón de su madre escuchando Kool And The Gang, y otros héroes de la escena disco. Dueño de una gran cantidad de placas, Tom solía realizar seleccionados de canciones para agasajar a sus amigos y familiares durante las reuniones armadas en su casa. A los pocos días de este encuentro, en la casa de su novia, Andy se junta con Tom. Allí escucharon música, tocaron la guitarra y, gracias a la afinidad instantánea que consiguieron, se juntaron sin muchas pretensiones. De esta manera, recalaron en Londres. Al llegar a la gran ciudad inglesa, se dieron cuenta de lo duro que era el mercado dance. Por ese motivo, y para hacer a un lado la mafia de los productores allí afincados, deciden crear su propio club, al cual denominan Groove Armada. El nombre está inspirado en un night club de Newcastle que funcionaba en la década del 70. Este excéntrico lugar era, en otras épocas, frecuentemente visitado por Joe un viejo amigo de Tom, quien gracias a su compañero llegó a conocer el lugar. Volviendo a Groove Armada, el recinto contaba con dos ambientes que funcionaban como pistas independientes. En uno Cato pasaba discos house y en el otro Findlay le daba sabor a su sector musicalizando con temas funk. Con el transcurso de los meses, la disco se transformó en una auténtica atracción, y los creadores de la misma, la dispusieron para que todo transcurra en un solo ambiente, y comenzaron a pinchar discos juntos. Así, sampleando sonidos en vivo, agregándoles melodías, y tocando algún instrumento encima, fueron naciendo algunas canciones, las cuales lentamente se iban convirtiendo en éxitos de las trasnochadas fiestas. Cuando ya contaban en su haber con una buena cantidad de tracks, deciden insertarse en el mercado discográfico utilizando el mismo nombre que el de su discoteca. Luego de haber debutado en marzo de 1998 con la placa Northern star, la cual pasó desapercibida, el dúo se ausenta de la ciudad con la intención de estar más cerca de la naturaleza, en un ambiente alejado para poder lograr inspiración y, de esa manera, componer lo que sería su disco de despegue definitivo. Así, en julio de 1999 ve la luz el segundo trabajo discográfico de Groove Armada al cual bautizaron simplemente Vertigo. El disco muestra variedad sonora, buen gusto a la hora de agregar algún arreglo y una sinergia contundente entre sus componentes. A las pocas semanas de su edición, la placa alcanzó el disco de platino en el Reino Unido con 68.000 copias vendidas, llegando al top 20 de los charts británicos. Groove Armada da muestras en Vertigo de tener una fuerte raíz en la pista de baile. Pero, fuera de su profesión de DJ’s, cuando se presentan en directo, utilizan una banda de siete miembros, quienes potencian, y le dan un toque humano al dúo en vivo. Contrariamente a todo pronóstico, el segundo disco sube la apuesta de su antecesor. Lovebox es un trabajo consistente que les brindaría un gran crédito artístico. Uniendo estos tres trabajo más algún que otra placa en plan DJ, en septiembre del 2004 Andy y Tom editan un grandes éxitos, el cual oficia de resumen de una trayectoria corta pero fructífera. Soundboy Rock (2007) es su último LP con material original hasta el momento.
Para conocer algo de los comienzos de Groove Armada habría que trasladarse hasta mediados de los 90. Allí, gracias a su novia, Andy Cato conoce en una fiesta privada al periodista deportivo Tom Findlay. De los dos, quien poseía más conocimientos musicales era Cato, que en su niñez había escuchado mucha música, y se las ingeniaba para tocar varios instrumentos como el trombón, guitarra, y algo de teclados.
En cuanto a Findlay, solía ejecutar muy precariamente el bajo y la trompeta. Pero su mayor caudal de aprendizaje lo logró como oyente de vinilos. Se pasaba horas en el sillón de su madre escuchando Kool And The Gang, y otros héroes de la escena disco. Dueño de una gran cantidad de placas, Tom solía realizar seleccionados de canciones para agasajar a sus amigos y familiares durante las reuniones armadas en su casa.
A los pocos días de este encuentro, en la casa de su novia, Andy se junta con Tom. Allí escucharon música, tocaron la guitarra y, gracias a la afinidad instantánea que consiguieron, se juntaron sin muchas pretensiones. De esta manera, recalaron en Londres. Al llegar a la gran ciudad inglesa, se dieron cuenta de lo duro que era el mercado dance. Por ese motivo, y para hacer a un lado la mafia de los productores allí afincados, deciden crear su propio club, al cual denominan Groove Armada.
El nombre está inspirado en un night club de Newcastle que funcionaba en la década del 70. Este excéntrico lugar era, en otras épocas, frecuentemente visitado por Joe un viejo amigo de Tom, quien gracias a su compañero llegó a conocer el lugar. Volviendo a Groove Armada, el recinto contaba con dos ambientes que funcionaban como pistas independientes. En uno Cato pasaba discos house y en el otro Findlay le daba sabor a su sector musicalizando con temas funk.
Con el transcurso de los meses, la disco se transformó en una auténtica atracción, y los creadores de la misma, la dispusieron para que todo transcurra en un solo ambiente, y comenzaron a pinchar discos juntos. Así, sampleando sonidos en vivo, agregándoles melodías, y tocando algún instrumento encima, fueron naciendo algunas canciones, las cuales lentamente se iban convirtiendo en éxitos de las trasnochadas fiestas. Cuando ya contaban en su haber con una buena cantidad de tracks, deciden insertarse en el mercado discográfico utilizando el mismo nombre que el de su discoteca.
Luego de haber debutado en marzo de 1998 con la placa Northern star, la cual pasó desapercibida, el dúo se ausenta de la ciudad con la intención de estar más cerca de la naturaleza, en un ambiente alejado para poder lograr inspiración y, de esa manera, componer lo que sería su disco de despegue definitivo.
Así, en julio de 1999 ve la luz el segundo trabajo discográfico de Groove Armada al cual bautizaron simplemente Vertigo. El disco muestra variedad sonora, buen gusto a la hora de agregar algún arreglo y una sinergia contundente entre sus componentes. A las pocas semanas de su edición, la placa alcanzó el disco de platino en el Reino Unido con 68.000 copias vendidas, llegando al top 20 de los charts británicos.
Groove Armada da muestras en Vertigo de tener una fuerte raíz en la pista de baile. Pero, fuera de su profesión de DJ’s, cuando se presentan en directo, utilizan una banda de siete miembros, quienes potencian, y le dan un toque humano al dúo en vivo. Contrariamente a todo pronóstico, el segundo disco sube la apuesta de su antecesor. Lovebox es un trabajo consistente que les brindaría un gran crédito artístico. Uniendo estos tres trabajo más algún que otra placa en plan DJ, en septiembre del 2004 Andy y Tom editan un grandes éxitos, el cual oficia de resumen de una trayectoria corta pero fructífera. Soundboy Rock (2007) es su último LP con material original hasta el momento.